domingo, 21 de junio de 2009

11 - Un cambio de aires

11

Un cambio de aires


En silencio regresaron a la ciudad y sin dar mayor explicación Sonia se dirigió al restaurante favorito de los tres. Compraron enormes cantidades de Sushi para llevar, cervezas belgas para todos y pasaron por un café muy cargado para Sonia. En un semáforo sacó su cartera de la bolsa y se puso a hacer cálculos mentales mientras emitía extraños sonidos. Sus amigos la conocían lo suficiente para no interrumpirla, se estaba poniendo de acuerdo consigo misma como decía con frecuencia. Con un sonoro “vendido” arrancó con la luz verde y le pidió a Remigio que pusiera música de carretera.


En los siguientes 20 minutos el único sonido que emitieron fue un leve tarareo mientras el coche plateado atravesaba la ciudad y tomaba la autopista a Veracruz. Repentinamente, Sonia paró en seco el coche y a Massive Attack; volteó hacia los demás y dijo:


– Oaxaca es demasiado grande, ¿Cuetzalan o Tlacotalpan?


– ¿Por qué no Acapulco? – Preguntó Lina


– Porque todavía no tenemos suficiente información para adentrarnos en el territorio de María Pantera – Contestó Remigio


– Y además estamos en otra carretera – Añadió Sonia


– ¿Y Tlaxcala? – Dijo tímidamente Julie que todavía no estaba suficientemente familiarizada con la relación entre sus compañeros como para descubrir todo lo implícito en su extraña dinámica.


– Porque naaadie va a Tlaxcala – dijo lentamente Sonia con la misma entonación que empleaba al explicar las cuatro vías de Tomás de Aquino o la hermenéutica de Gadamer. Y volteando a buscar el acuerdo en los ojos de Remigio, arrancó el coche mientras decía – Pues a Tlacotalpan, hoy no tengo paciencia para tanta curva. Es eso, o Nayarit.


Y Lina y Remigio contestaron en coro:


– Pero Nayarit no existe.


– Por eso, a Tlacotalpan


* * *


Entraron a la Ciudad después de las tres de la mañana. Remigio los condujo a la casa de la famosa Maruja y se acostaron a dormir.


Cuando Sonia se despertó, encontró a Remigio y a Julie discutiendo acaloradamente sobre el posible futuro de la baladista (¿qué otra cosa podía participar en el OTI?) Lina, empezando por su nombre


– ¿Por qué no Lina Duarte? – Preguntó Remigio


– Porque nadie participa con su verdadero nombre si no es también con su verdadero país – le contestó Julie con tono de estar explicando algo absolutamente evidente. –Por Dios, querido, si tú sabes tan bien como yo todo lo que depende de un buen nombre, en particular, para un cantante.


– Realmente no había tenido tiempo para pensarlo. Lina no es suficientemente serio, ¿qué tal Magnolia?


– Demasiado Floral


– ¿Y qué te parecería un nombre mitológico, griego o nórdico?


– Estamos hablando del OTI ¿no es demasiada sofisticación?


– Definitivamente ningún nombre con k, todos me parece ho-rri-bles


– ¿Y si usamos algún nombre vasco? como que se pusieron de moda de repente.


-¿Y quién se sabe nombres vascos de mujer? Todo mundo está familiarizado con los de hombre: Iñaki, Iker…


Sonia los interrumpió diciendo:


–Hablando de nombres vascos, tengo un extraño desasosiego. Necesito un internet y lo necesito ahora.


–Pues vamos todos, que si algo he aprendido después de tantos años de leer novelas de detectives y misterio es que las cosas malas pasan cuando los protagonistas se separan– Dijo inesperadamente Lina con cara de acabarse de despertar.


Sonia se paró en el umbral y con un gesto propio de su condición de maestra la indicó al resto del grupo que la siguiera.


Mientras Sonia revisaba su correo con sumo interés, Remigio y Julie seguían discutiendo las posibilidades de Lina y su participación en el OTI.


–Tenemos que adoptar mi misma estrategia. Tiene que participar como representante de alguna oscura nación caribeña. Cuba está descartada, es demasiado visible y hay demasiado cubano entre los VEE. Ya mi contacto está explorando las posibilidades.


– ¿Y cuándo lo sabremos? Tenemos que trabajar en su acento– Dijo Remigio


– ¿No les basta con haberme hecho rubia platinada? Ahora resulta que también tendré que fingir un acento– Intervino Lina


– Eso déjanoslo a nosotros, guapa. Tú concéntrate en tu voz – la trató de tranquilizar Julie.


– Ése es otro gran problema – Añadió Sonia inesperadamente – Ya conocemos la historia del pobre tío tenor que la quiso enseñar a cantar y después de algunas sesiones le preguntó si no prefería aprender a tocar el piano. – Y tras una pausa para analizar la reacción de Julie ante ese inconveniente con el que no contaba, dijo lento y más bajo – ¿Saben que Patxi está muerta? Vámonos a comer algo y les explico, mi azúcar está al borde del colapso.


* * *


– ¿Alguna vez les conté que mis primos de Madrid tienen un amigo que es sobrecargo de Iberia? Pues Toñete iba en el vuelo México - Madrid que tomó Patxi después de que la vimos en Viernes Entero Ensaladas. Cuando toda la gente se bajó del avión, fue él quien descubrió que Patxi, aparentemente dormida, estaba muerta. Al principio creyeron que había sido muerte natural, pero después encontraron junto a sus guantes y su sombrero una hoja con un mensaje que les hizo sospechar. ¿Qué creen que decía?


– ¡Aún hay más! Gritaron Remigio y Lina al mismo tiempo.


– Exactamente – continuó Sonia – La policía española lo está tratando como un posible asesinato. Ahora hay que esperar los resultados de la autopsia, pero dice Toñete que no cree que se sepa nada antes del lunes o martes.


– ¿Y cómo te enteraste tan rápido? sin duda eres más eficiente que Paty Chapoy – Preguntó intrigada Julie.


– Mi amiga es medio bruja – Contestó Remigio.


– Fue claramente la combinación de una corazonada y buena suerte. Pensé escribirle a Toñete para que me contara si había ocurrido algo en los vuelos. Que él hubiera sido precisamente quien descubriera el cuerpo, que estuviera en línea cuando mandé el correo y que además recnociera a Francisco Gattorno en el avión es suerte, mucha suerte. – Explicó Sonia.


– ¿A qué habrá ido Gattorno a España? preguntó Lina


– También chequé eso, al parecer iba a dar una plática sobre la filmación de Fresa y Chocolate en un ciclo de conferencias sobre cine gay en la Universidad de Granada.– Contestó Sonia


– Gattorno pertenece a los VEE – dijo Julie súbitamente más interesada en la historia.


– Eso supuse. Definitivamente tenemos que llegar al fondo de esto. Sabemos que algo motivó a María Pantera a matar a mujeres que estuvieron cerca de ella en los ochentas y algo tiene que ver con el festival OTI. Julie, tú tienes que irte a la ciudad de México a visitar directamente a tus contactos y a acabar de amarrar la participación de Lina en el festival. Remigio ¿ya se te ocurrió algo para la canción? Tenemos que apurarnos. Lina, ¿necesitas algo de Puebla? Dionisio mi primo viene mañana y ya le encargué algunas cosas sin las que no puedo vivir.


– ¿A qué viene? ¿no lo estarán siguiendo? Preguntó Lina preocupada.


– Necesitamos su enciclopédico conocimiento de datos inútiles. Además ha visto cosas raras por mi casa que pueden ser una pieza más en este rompecabezas. Está esperando a que le mande por mensajito cómo venirse, creo que vía Cosamaloapan es lo más adecuado. Puebla – México, México – Córdoba, Córdoba – Orizaba en Micro, Orizaba – Cosamaloapan y nosotros lo recogemos a las 4:30 en la terminal de ADO de Cosamaloapan.


– Perfecto, así yo aprovecho para irme al D.F. – dijo Julie


El resto del día pasó sin mayores incidentes. Por seguridad estacionaron el coche de Sonia muy lejos de la casa de Maruja y después se dedicaron a pasear juntos por Tlacotalpan. Tenían mucho en qué pensar y mucho que planear. Los colores del atardecer sobre el Papaloapan logró llenarlos de una calma que hacía mucho no sentían. María Pantera, los VEE, los festivales decadentes de televisión y los asesinatos misteriosos parecían muy lejanos. Las viejas anécdotas sobre nódulos de información turística, celebraciones locales, toritos de cacahuate y amores del pasado lograron mantenerlos distraídos varias horas. Volvieron caminando a casa de Maruja y a la primera noche completa de sueño que habían tenido desde Viernes Entero Ensaladas.