WOW. Sonia está muy ansiosa por abrir el sobre, para estar tan escéptica sobre Doña María Pantera como yo misma; aunque por motivos distintos. Ella no soporta quedarse sin entender algo (apuesto la próxima ronda de café infame y camels que sigue rumiando lo de "viernes entero ensaladas"). A mí no me importa, porque estoy convencida que María Pantera es como Juan Charrasquedado, un personaje ficticio que usaba mi abuela para ejemplarizarme; claro que no le funcionó porque nunca me quedó claro si era buen o mal ejemplo.
Pero la historia le encantó a Remigio e insistió que era un personaje real. Debo confesar que aunque no lo creo, me encantaría; después de todo mi abuela también conoció una Gorgonia y unos cuates llamados Marimba y Guajolote. Sospecho que Mazatlán de esos años ha de haber sido como Macondo.
No fue hasta que Remigio, que conoce a todo mundo, consiguió los datos de la dichosa Patxi (una mezcla de La Tigresa, Marisa Paredes en Tacones Lejanos y Laura León) que Sonia y yo nos decidimos a lanzarnos a esta búsqueda absurda. A Sonia le gustó la búsqueda; a mí, lo absurdo.
¿Remigio? Él sólo tiene curiosidad. Su enciclopédico conocimiento de datos inútiles (¿Raúl Velasco? creo que ni a él le interesaban sus parientes. En una de esas y están emparentados) está incompleto sin María Pantera.
Creo que le corresponde a Remigio abrir el sobre.
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